“El Departamento de Estado está lanzando un Observatorio de Conflictos para recopilar evidencia de código abierto de las atrocidades del gobierno ruso en Ucrania”, publicó la secretaría encargada de la diplomacia estadounidense en su cuenta de la red social Twitter.

Y agregó: “La recopilación de pruebas robusta y accesible ayudará a los esfuerzos de rendición de cuentas y asistirá a futuros enjuiciamientos”.

A su vez, el comunicado de la administración Biden comentó que la información y documentación recopilada será compartida en una “plataforma en línea” y reiteró que estarán destinados a “ayudar a refutar los esfuerzos de desinformación de Rusia”,

Por su parte, el secretario de esa cartera, Antony Blinken, también comentó sobre el lanzamiento del observatorio en su cuenta de Twitter: “Apoyamos una variedad de iniciativas para documentar crímenes y llevar a los perpetradores ante la justicia”.

Según Blinken, Conflict Watch “capturará y arrojará luz sobre la evidencia de código abierto de los crímenes de guerra perpetrados por Rusia y otras atrocidades que se están cometiendo en Ucrania”.

Estados Unidos acusó formalmente a Rusia de crímenes de guerra en Ucrania, en particular contra civiles, y se comprometió a trabajar para responsabilizar a sus autores y patrocinadores.

En abril el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó a su homólogo ruso, Vladimir Putin, de “criminal de guerra” y “carnicero”, y fue más allá que su propio gobierno al considerar que Moscú estaba perpetrando un “genocidio” en Ucrania tras las denuncias de matanzas generalizadas de civiles en la ciudad de Bucha.

La difusión de fotos de numerosos “cuerpos de ucranianos tirados en las calles de Bucha y arrojados a fosas comunes” que circularon por todo el mundo, algunos con sus manos atadas atrás, provocó una ola de indignación internacional aunque Moscú lo calificó de farsa y estratagema ucraniana para dañar la imagen rusa y promover acciones en su contra.