“El bolsonarismo puede celebrar”, escribió la analista Míriam Leitão en su columna en el diario O Globo. Al menos nueve exministros y el vicepresidente, Hamilton Mourão, obtuvieron triunfos en las urnas.
Además de presidente y vicepresidente de la República los brasileños estaban llamados a elegir a los gobernadores de los 27 estados (incluido el Distrito Federal de Brasilia), los 513 escaños de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado de 81 asientos, así como las asambleas legislativas estatales.
El Partido Liberal de Jair Bolsonaro tendrá la mayor bancada en la Cámara de Diputados, con 99 legisladores, y en el Senado, figuras del PL y agrupaciones aliadas se alzaron con al menos 14 de las 27 escaños en liza.
Las elecciones también dieron alguna victoria a las causas progresistas, con las primeras diputadas federales trans de Brasil: Erika Hilton, Duda Salabert, y Robeyoncé Lima, quienes representarán a los estados de San Pablo, Belo Horizonte y Pernambuco, respectivamente.
Brasil tuvo el mayor número de postulantes trans en las elecciones de este año, con aspirantes de ese colectivo en listas de once partidos, de acuerdo a O Globo.
Los aliados de Jair Bolsonaro en el Congreso
Los nuevos congresistas bolsonaristas incluyen dos exministros muy controvertidos: el extitular de Medioambiente Ricardo Salles, que dejó el gobierno por sospechas de corrupción, y Eduardo Pazuello, criticado por su gestión al frente de la cartera de Salud en el auge de la pandemia de Covid-19 y quien fue el diputado más votado en el estado de Río de Janeiro.
Otro candidato del PL, Nikolas Ferreira, fue el diputado más votado de Brasil, con más de 1,4 millones de votos, con solo 26 años.
La lista de bolsonaristas al Senado incluye desde el exfubolista Romario (reelecto) hasta Marcos Ponte, un antiguo astronauta y extitular de Ciencia que desbancó a un aliado de Lula, Márcio França, favorito en las encuestas.
Otros tres exministros, la ultraconservadora Damares Alves (Mujer); Tereza Cristina (Agricultura) y Rogerio Marino (Desarrollo) y el actual vicepresidente, fueron también electos al Senado, que en 2023 debe confirmar dos jueces del Supremo Tribunal Federal (STF).
También entran a la Cámara alta el exjuez y exministro Sérgio Moro que rompió con Bolsonaro y el exfiscal Dalton Dellagnol, estrellas de la megacausa Lava Jato. Los dos llevaron a Lula da Silva a la cárcel durante 19 meses, pero la sentencia fue anulada por irregularidades procesales.
Elección de gobernadores en Brasil
Los brasileños también eligieron a los gobernadores de los 27 estados (incluido el Distrito Federal de Brasilia).
En Río de Janeiro fue elegido Claudio Castro (PL) pero la mayor sorpresa ocurrió en San Pablo, el estado más poblado y rico de Brasil, con la victoria parcial en primera vuelta del bolsonarista Tarcisio Freitas, extitular de Infraestrucutra, que aparecía segundo en los sondeos.
Freitas (PL) venció a Fernando Haddad, exalcalde de la megalópolis de San Pablo y delfín de Lula derrotado por Bolsonaro en las presidenciales de 2018, y los dos se medirán el 30 de octubre en un balotaje.
Esta es la primera elección en 28 años en la que el tradicional Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), del expresidente Henrique Fernando Cardoso y del compañero de fórmula de Lula, Geraldo Alckmin, no disputa el poder en esa región.