Tigre y San Pablo se ven las caras por la primera fecha del Grupo D de la Copa Sudamericana. Es un duelo con bastante historia, por la final de la misma copa del 2012, que el conjunto Tricolor se quedó con el título y todo el Matador tuvo un fuerte cruce con la policía local y no logró salir a jugar el segundo tiempo. Por eso este reencuentro iba a ser más complicado y con tintes violentos.
Una de las medidas más curiosas de los fanáticos del equipo de Brasil, avisó que mujeres y niños no viajen para Argentina, porque temían una situación violenta con el elenco argentino. Y pasó, pero fue insólito.
Los hinchas que se acercaron al Estadio José Dellagiovanna, y al acercarse un micro a las inmediaciones, los propios simpatizantes del Matador atacaron el autobús de sus jugadores.
El volante Agustín Cardozo publicó una foto en su Instagram con un vidrio roto y una piedra en sus manos-. A eso le sumó un mensaje para todos: “Rescátense que somos nosotros”.
La Aprevide contó con la cooperación de la Comisaría de Represión de Delitos en el Deporte del Estado de San Pablo para aplicar el derecho de admisión a los fanáticos llegados desde Brasil. El plantel tricolor contará con custodia desde su salida del hotel de concentración hasta el estadio.