Desde el lado ucraniano, el ejército había reportado el supuesto misil balístico intercontinental, y además la utilización de misiles hipersónicos Kh-47M2 Kinzhal y misiles de crucero Kh-101.
Previamente, aseguraron que se trataba del RS-26 Rubezh, un misil balístico intercontinental con un alcance de 5.800 km, que puede portar una ojiva nuclear, aunque Ucrania aseguró que el misil lanzado no llevaba carga nuclear.
Estados Unidos aseguró que se trató de un misil de rango medio
Pero horas más tarde, Estados Unidos dio nuevas precisiones sobre lo ocurrido previamente, donde explicaron que el misil empleado fue de alcance medio, con un rango máximo de entre 1.000 y 3.000 kilómetros, a diferencia de los misiles balísticos intercontinentales, diseñados principalmente para portar armas nucleares y que superan los 5.500 kilómetros de alcance.
De acuerdo a Putin, las defensas aéreas no pudieron interceptar el misil denominado Oreshnik, cuya velocidad de ataque es de Mach 10, es decir, entre 2,5 y 3 kilómetros por segundo: ”Los sistemas modernos de defensa antiaérea… no pueden interceptar este tipo de misiles. Es imposible”, afirmó. ”A día de hoy no existen medios para contrarrestar semejante arma”, agregó.
Además, lo describió como un ”misil balístico en configuración hipersónica no nuclear”, afirmando que la prueba realizada este jueves había sido un éxito y había alcanzado su objetivo.
Por su parte, a través de su portavoz, el primer ministro británico, Keir Starmer, confirmó que ”es la primera vez que Rusia utiliza un misil balístico en Ucrania de varios miles de kilómetros de alcance”.
Vladimir Putin advirtió que el conflicto se convirtió en “global” y podría atacar a otros países
“Después de los ataques de largo alcance de Ucrania, un conflicto regional adquirió elementos de uno global”, afirmó Putin en declaraciones televisivas y advirtió que Rusia esta “lista” para responder cualquier agresión.
A comienzo de semana, Ucrania lanzó misiles de mediano y largo alcance estadounidenses y británicos contra territorio ruso. Estaba en duda si Rusia respondería y, si lo hacía, cuándo. Este jueves, más temprano, Kiev denunció que Rusia disparó un misil intercontinental contra la ciudad de Dnipro, pero funcionarios occidentales lo pusieron en duda. Putin lo confirmó más tarde.
“Nos consideramos con derecho a usar nuestras armas contra instalaciones militares de aquellos países que permitan usar sus armas contra nuestras instalaciones”, justificó Putin en declaraciones televisivas y prometió que Rusia “responderá con igual determinación” si insisten con una “escalada de acciones agresivas”.
En esta línea de mostrar fortaleza militar, el presidente ruso afirmó que “nuestros sistemas de defensa aérea repelieron esos ataques”. En cambio, los estadounidenses que utilizan Ucrania no podrían interceptar misiles rusos, aseguró Putin. Sin embargo, anticipó que antes de nuevos ataques a Ucrania avisarán con tiempo para que los civiles puedan evacuar, tal como lo hace Israel en Medio Oriente.