Un joven de 20 años fue asesinado de dos tiros en la cabeza dentro de un búnker narco de Lanús. El entorno pide justicia ya que no hay detenidos por el crimen.

La víctima, identificada como Lucas Sebastián Giulietti y oriunda del Barrio Federal de Ensenada, contaba con antecedentes penales por robos y encubrimiento: Según fuentes de la investigación, “trabajaba como soldadito para una banda de narcotraficantes”.

El crimen ocurrió a fines de octubre, aunque el cuerpo fue hallado varios días después de su muerte, tal como determinó la autopsia.

Giulietti había desaparecido el 29 de octubre; su madre realizó la denuncia por desaparición el 2 de noviembre, y por el momento no hay ningún detenido. La familia del joven reclama justicia y apunta directamente contra efectivos de la Comisaría Cuarta de Lanús.

El joven tenía un frondoso historial delictivo con causas abiertas en La Plata y Ensenada, que incluyen robos calificados, resistencia a la autoridad, amenazas y encubrimiento.