Significa invertir en un inmueble, que recién sale a la venta, siendo aún un proyecto, está el terreno, pero solo tiene los planos y los permisos aprobados. Aún no está en obra. Cuando comience la construcción, se realiza la excavación para la cimentación, se ve el pozo. De ahí el nombre.

Ventajas de invertir en “el pozo”

Un proyecto de vivienda “en pozo” es una preventa que sale al mercado. Invertir en esta etapa consiste en comprar un apartamento antes de que esté 100% concluido.

Comprando en pozo se obtiene un precio menor al del momento de ocupar, que puede rondar el 30% del precio de compra. Pensemos que la construcción de un edificio demanda de 24 a 36 meses, tomando en cuenta la fecha de lanzamiento, el inicio de la construcción y hasta la efectiva entrega del inmueble a su propietario.

A los inversores no solo les importa el precio, pues si está en una zona en crecimiento, su capital crecerá por comprar en pozo y además por el desarrollo del lugar.

Es importante destacar que, por ser de los primeros en comprar un departamento en el edificio, tiene la ventaja de elegir la tipología y el piso del inmueble.

Otra de las grandes ventajas de la compra en pozo es que el inversor se convierte en propietario de un inmueble.

A su vez, en mercados en crecimiento como lo es el uruguayo, se genera una revalorización, ya que la propiedad va aumentando su valor a medida que se va construyendo. Y por supuesto, aún más, una vez terminado el edificio.

En cuanto al sistema de pago, se realiza un primer desembolso que ronda el 30% del valor total del inmueble, y el resto se abona en cuotas hasta la finalización del edificio. Esta financiación no genera intereses y se mantiene el precio original pactado en el momento de reservar la unidad.

Por qué comprar en el pozo

Los inversores compran inmuebles para luego rentarlos. Lo que buscan es la mejor inversión, que se logra al comprar al menor precio (en el pozo) y lograr la mayor rentabilidad. Tomando en cuenta ese ahorro en el precio final, y relacionado con el valor del alquiler, la rentabilidad puede llegar a aumentar 1,5% anual.

Desde el punto de vista financiero, comprar un apartamento en el pozo te brinda la posibilidad de adquirir una propiedad sin contar con todo el dinero al momento del pago inicial.

Genera beneficios a largo plazo. Al finalizar la obra, tendrá un departamento nuevo y a estrenar, que además puede convertirse en un ingreso fijo al colocarlo en alquiler.

En algunos países, como Uruguay, comprar en el pozo permite acceder a beneficios fiscales por 10 años al volcar el inmueble al alquiler.

Conclusiones

El inversor compra en el pozo para lograr mejor precio, contar con un inmueble nuevo, destinarlo al arrendamiento y obtener máximas rentabilidades.

El parque de viviendas destinadas al alquiler es cada vez mayor. Casi la totalidad de las nuevas construcciones se piensan para inversores, quienes vuelcan el inmueble al arrendamiento, debido a que la mayoría de los jóvenes prefieren alquilar.

El desarrollo de construcciones y edificios, se dan en mercados de arrendamientos sólidos, con leyes claras. Los inversores buscan seguridad y estabilidad.

La tendencia es construir edificios sostenibles, que no solo son preferidos por los inversores, sino también por los futuros arrendatarios. El mercado es quien manda, y si en la actualidad el consumidor (comprador/arrendador) prefiere inmuebles energéticamente eficientes o más sostenibles, pues evidentemente hay que ofrecerle lo que pide.

* Gonzalo Martínez Vargas es CEO de Moebius Consultora Inmobiliaria