Alcoholes del Uruguay (ALUR), empresa colateral de Ancap decidió frenar las operaciones en la planta de Bella Unión( Artigas) debido a los paros parciales de una hora por turno sin guardia gremial que llevó adelante el Sindicato de Obreros de la Caña de Azúcar (SOCA).
Este jueves, ALUR entendió prudente paralizar la zafra de la caña de azúcar debido a “razones de seguridad e integridad de las instalaciones”, según un comunicado oficial difundido por Ancap.
La empresa alega que las medidas sindicales fueron adoptadas de “sorpresivamente” y “sin razonable relación con los temas en consideración”, ni con los avances en la negociación colectiva. A su vez, se añade que ya se había llegado a un acuerdo con los trabajadores para la resolución del conflicto.
“La parada del complejo industrial obligó a detener las tareas de cosecha que se venían desarrollando a gran ritmo y con rendimientos nuevamente excelentes”, se lamentaron desde el ente autónomo.
La compañía estatal decidió ir más allá y comunicó que la medida adoptada por el SOCA afecta a los productores de caña, a los transportistas y, principalmente, “a los cortadores de caña que perderán sus ingresos, que son a destajo, de forma irrecuperable”.
Ancap no para de sumar dolores de cabeza
Las medidas de fuerza de los cañeros en ALUR, se añaden a una escalada de conflictos que viene teniendo el Grupo Ancap en relación con sus gremios, los cuales se han pronunciado en contra de la privatización del negocio del portal y de la planta de aerocombustibles en Laguna del Sauce (Maldonado).
A su vez, en las últimas horas, la Federación Ancap (Fancap) —sindicato de Ancap—, denunció al directorio de la empresa por “persecución sindical” ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ya que acusan que “les hacen firmar” un registro sobre su adherencia a medidas gremiales.
