La ciudad inglesa de Cambridge es reconocida mundialmente por su prestigiosa universidad, así cómo también por sus avances científicos. Desde el gobierno británico desarrollaron un ambicioso plan para reforzar la reputación de polo tecnológico en la capital universitaria y rivalizar con Silicón Valley, ubicada en San Francisco y conocida como el centro mundial del desarrollo tecnológico.
Según el ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, el objetivo final del proyecto es que la ciudad se convierta en “el próximo Silicon Vallley del planeta”. La idea ya está en marcha y el gobierno británico no duda en invertir: ya anunciaron que destinarán 3 millones de libras para impulsar la nueva “capital científica europea“.
Por qué Cambridge es la ciudad elegida para ser el nuevo Silicon Valley
Cambridge tiene una tradición de larga data. La icónica universidad homónima fue creada en 1209 y, desde entonces, la ciudad es uno de los centros universitarios y de investigación más prestigiosos del mundo.
La prestigiosa Cambridge, una de la instituciones que comienzan la huelga.
Incluida en el top 5 de las mejores universidades del planeta, el establecimiento de estudios superiores ubicado en Cambridge recibe a más de 17 mil estudiantes por año. Además, su capital humano y industria del conocimiento la colocan como una candidata ideal para ser el motor de un nuevo polo científico.
Mark Slack es cofundador de CMR Surgical – una compañía especializada en ciencias de la vida que produce robots capaces de realizar cirugías “mínimamente invasivas”-. CMR Surgical es, desde 2019, una de las mayores empresas emergentes de Inglaterra.
Según Slack “no hay muchos lugares en el mundo donde podríamos haberlo logrado”. El director de la empresa afirmó que “los conocimientos técnicos que necesitábamos en términos de físicos, matemáticos e informáticos habrían sido bastante difíciles de encontrar en otro lugar“.
El tamaño reducido de la población no parece ser un obstáculo para las ambiciones de Cambridge. Si bien su competencia californiana cuenta con tres millones de habitantes – a diferencia de los 150.000 ciudadanos de la ciudad inglesa – esto no se traduce necesariamente en una diferencia elevada en el desarrollo: Silicon Valley tiene sólo el triple de empresas emergentes en comparación con Cambridge.
Silicon Valley 1200
Innovación científica y empresas emergentes: los detalles del ambicioso proyecto de Inglaterra
El ambicioso proyecto de la ciudad de Cambridge es competir, en el mediano plazo, con Silicon Valley, su rival en Estados Unidos y actualmente el rey indiscutible de la innovación tecnológica en el mundo. Pero la localidad inglesa ya dio los primeros pasos en su plan.
Para comenzar, Innovate Cambridge es un proyecto de colaboración entre la Universidad y grandes empresas, entre las que esta incluida Microsoft y el grupo farmacéutico AstraZeneca, que tiene como objetivo duplicar el número de empresas emergentes en la ciudad en un valor superior a mil millones de dólares antes de 2035.
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En total, ya hay 23 grandes empresas emergentes que nacieron en la pequeña ciudad inglesa. Esto la ubica a la par de Berlín, pero por debajo de Londres, que cuenta con 39.
Entre estas compañías locales se encuentran, por ejemplo, el gigante tecnológico Arm, cuyos modelos de semiconductores se utilizan en la mayoría de los teléfonos inteligentes del mundo. También están ubicadas en Cambridge la sociedad de seguridad informática Darktrace y la compañía Abcam, especializada en la producción de anticuerpos destinados a la investigación
Según la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), una de las agencias de la ONU, Cambridge es la ciudad con la actividad científica y tecnológica más intensa del mundo, si se la mide en proporción a la densidad de población. Además, un estudio del banco británico Virgin Money nombró el año pasado a esta localidad como la mejor ciudad del país para iniciar un negocio.
En el Reino Unido, las empresas emergentes recaudaron más de 21.000 millones de dólares durante 2023, una cifra a la baja después de dos años excepcionales en 2021 y 2022. Sin embargo, el país sigue siendo el tercer ecosistema tecnológico más grande del mundo después de Estados Unidos y China, según un estudio publicado a principios de enero por la firma Dealroom y el banco HSBC.
